Paolo Sorrentino se convierte en uno de los grandes triunfadores de la noche del cine italiano con la cinta Fue la mano de Dios, con la que conquista el Premio David Di Donatello a la Mejor Dirección y a la Mejor Película. Premios que ha dedicado a sus padres, sobre cuya pérdida ahonda en la obra, la más personal de su carrera. El filme también se lleva el reconocimiento a mejor fotografía y a la actriz no protagonista, para Teresa Saponangelo. Además, se llev el premio de los jóvenes. En el plano técnico, la triunfadora es Freaks out, una inédita producción de súperhéroes «a la italiana» que gana la estatuilla a mejor productor, escenografía, maquillaje, peluquería, efectos visuales y fotografía, esta última «ex aequo» con la de Sorrentino.
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