Jerarquía de valores, por Denis Marion
Denis Marion fue el seudónimo de Marcel Defosse, profesor y crítico de cine belga, más conocido por ser coguionista junto a André Malraux del film «Sierra de Teruel» dirigido por este último. En este fragmento que traducimos, se pregunta a sí mismo acerca del ejercicio de la crítica de cine y la banalidad de la producción en la industria. Dice así:
Creado por y para la multitud, el portentoso instrumento del cine tan pronto es utilizado muy bien como muy mal. Las mil películas que se producen cada año están lejos de ser intercambiables como bolígrafos producidos en serie.
Así, después de haber determinado algunas características comunes, conviene insistir en lo que las diferencia y permite clasificarlas.
El mismo problema surge con las otras artes. Nada es más difícil, suponiendo que sea posible, que diferenciar el mérito de escritores, pintores, músicos. Sin embargo, estos se someten a un juicio en el que la sentencia no es discutida, con o sin razón por otra parte.
El tiempo actúa a modo de criba y apenas retiene un nombre, una obra de entre un centenar, o quizás entre un millar. Esto facilita la tarea del crítico y a la vez explica por qué se muestran tan tajantes en el veredicto sobre el pasado como circunspectos hacia sus contemporáneos.
El cine no es lo suficientemente viejo como para beneficiarse del juicio de la posteridad, y cabe la duda de que en un futuro este tenga alguna utilidad, dado que las películas desaparecen al cabo de cinco o diez años a lo sumo. A continuación, el celuloide inutilizable se vende a peso para recuperar parte de la materia prima. El negativo, podría ser conservado, y servir de matriz para nuevas copias. Hasta el momento, nadie ha solicitado la reedición de una película. Parece ser que prima el efecto de lo novedoso, y la falta absoluta de significado histórico.
Se prefiere la adaptación al gusto de los días de algunos temas que anteriormente gustaban, y periódicamente, se rueda en Francia “Los Miserables” y en Estados Unidos, “Doctor Jekyll y Mr. Hyde”.
Quedamos reducidos a la impresión del instante para juzgar a las películas.
Fragmento del libro «Aspects du cinéma» de Denis Marion. Les éditions lumière, Bruselas, 1945.