Federico Fellini ya tienen un museo en su ciudad natal de Rimini

Federico Fellini tiene por fin un museo en su ciudad, Rímini, que dedica varios espacios interactivos a la vida y a la obra, a los sueños y a la realidad, del legendario director italiano. El edificio, abandonado durante años, renace como la sede principal del nuevo museo, con múltiples instalaciones y gran despliegue de tecnologías inmersivas que permiten al visitante convertirse en «spettautore» (juego de palabras entre espectador y autor). El museo se distribuye en tres espacios: Castel Sismondo, Piazza Malatesta y Palazzo del Fulgor, cada uno de los cuales albergará diferentes iniciativas dedicadas al maestro del neorrealismo italiano. Se trata de un espacio de creatividad concebido por el Ministerio de Cultura italiano, contemplado entre los grandes proyectos nacionales de patrimonio cultural del país, y refleja el carácter visionario de Fellini, de su cine, de la relación con las artes, en un diálogo permanente entre innovación y tradición. El Museo Fellini conecta diferentes realidades en una sola vocación de transmitir el conocimiento y la chispa creativa que fue el gran director italiano. Los tres ejes involucrados son Castel Sismondo, la fortaleza malatesta del siglo XV a cuyo proyecto contribuyó Filippo Brunelleschi; el Palazzo del Fulgor, edificio del siglo XVIII, donde se ubica el Fulgor en la planta baja, el mítico cine inmortalizado en Amarcord y ahora reordenado con los decorados diseñados por el tres veces Óscar Dante Ferretti. Finalmente, para unir los dos edificios, Piazza Malatesta, un gran núcleo urbano, cuenta con zonas verdes, escenarios para espectáculos, instalaciones artísticas, un inmenso velo de agua para evocar el antiguo foso del castillo y un gran banco circular que, como en la final de , quiere ser un himno a la vida, a la solidaridad, al deseo de estar juntos. El Museo Fellini abre hoy y los visitantes pueden hacer reservas en su sitio web aunque oficialmente, el museo será presentado por el ministro de Cultura italiano Dario Franceschini, durante el Festival de Cine de Venecia el 31 de agosto.