Donostia, día 3: Seidl & Petersen

Donostia, día 3. La jornada dominical del Festival de Cine de San Sebastián viene con polémica incluida ya que se proyecta la película de Ulrich Seidl, sobre la pedofília, Sparta. El director austríaco Ulrich Seidl decide finalmente no asistir al Certamen como consecuencia la polémica generada por las familias de los niños que protagonizan el filme pero se muestra «muy agradecido con José Luis Rebordinos por apoyar Sparta desde el principio, a pesar de la presión mediática y de la repentina e inesperada polémica que ha suscitado» y considera que «mi presencia en la premiere podría ensombrecer la recepción de la película. Ahora es el momento de que la película hable por sí sola«. Ambientada en Rumanía, en esta ocasión el cineasta se centra en un hombre ya entrado ya en los 40, quien tras dejar a su mujer transforma una escuela en ruinas en una fortaleza con la ayuda de jóvenes de la zona. Junto a Rimini, culmina el díptico sobre la imposibilidad de escapar del pasado y sobre el dolor de encontrarse a uno mismo. Por su parte, en Resten af livet (Forever), de Frelle Petersen, es un drama optimista ambientado en Jutlandia del Sur, la zona más meridional de Dinamarca, que muestra a un matrimonio que pierde a su hijo ya adulto, y la familia, incluida su hija, queda paralizada por el dolor. Los tres tienen formas muy diferentes de sobrellevar el duelo y se desmorona, por lo que deberán ahora hallar el camino de regreso a la vida y de reconstrucción familiar. En esta jornada, además, una emocionada Juliette Binoche recibe el Premio Donostia en el Kursaal, de manos de Isabel Coixet, y se lo dedica entre otros al silencio: “Me gustaría dar las gracias a un compañero fiel de camino, el silencio, que es una presencia, antes de una toma, antes de interpretar. Es de ahí de donde yo saco las emociones, las sensaciones”.