La película de Sam Mendes, 1917, consigue los galardones de mejor drama y mejor director de la 77 edición de los Globos de Oro en las categorías de cine, mientras que Érase una vez en… Hollywood, de Quentin Tarantino se lleva tres, los de mejor comedia o musical, mejor guion y actor de reparto para Brad Pitt. La gala, celebrada en el hotel Beverly Hilton de Los Ángeles, y con cena vegana, es presentada por quinta vez por el cómico Ricky Gervais. Ni Dolor y gloria, de Pedro Almodóvar, nominada a mejor película de habla no inglesa, premio que recae en Parásitos, de Bong Joon-ho; ni Antonio Banderas, candidato al premio al mejor actor protagonista en un filme dramático; ni tampoco Ana de Armas, que optaba al premio a mejor actriz protagonista en comedia o musical, son galardonados. También es derrotada la producción de Netflix El irlandés, de Martin Scorsese, que partía como una de las favoritas y se fue de vacío. En el apartado interpretativo, Joaquin Phoenix se lleva el reconocimiento al mejor actor dramático por su papel en Joker, y Renée Zellweger el de mejor actriz dramática por su interpetación de Judy Garland en Judy, mientras que Taron Egerton se hace con el Globo de Oro al mejor actor en una comedia o musical por su encarnación de Elton John en Rocketman y Awkwafina en el apartado femenino por The Farewell. Además, la gala cuenta con dos premios que reconocien la trayectoria de dos figuras del cine y la televisión. En el ámbito cinematográfico, Tom Hanks recoge el premio honorífico Cecil B. Demille, mientras que Ellen DeGeneres hace lo propio con el premio Carol Burnett en televisión.
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