Nomadland, de Chloe Zhao, se convierte en la gran ganadora de los premios de la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (Bafta) con cuatro máscaras doradas, incluidas las de mejor película, mejor dirección y mejor actriz protagonista (Frances McDormand). La 74 edición de los premios Bafta, la primera gala virtual de la historia debido a la pandemia de la COVID-19, tiene lugar en un fantasmagórico Royal Albert Hall de Londres, donde además de los presentadores, Edith Bowman y Dermot O’Leary, solo asisten las personalidades británicas encargadas de entregar los premios. No acude tampoco el príncipe Guillermo, presidente de los Bafta, quien suspende su tradicional discurso por la reciente muerte de su abuelo, Felipe de Edimburgo, quien fue el primer presidente de la asociación y al que los Bafta homenajean dentro de su «In memoriam». También partía con siete nominaciones Rocks, el relato sobre la vida de una niña y su hermano y cómo se sobreponen al abandono de su madre en un barrio empobrecido de Londres, pero la cinta de Sarah Gavron tiene que conformarse con dos galardones, el de mejor casting y el de mejor actriz revelación, para Bukky Bakray. En el reparto de galardones, se queda con dos Soul, a mejor película de animación y mejor banda sonora; Sound of Metal, a mejor sonido y mejor montaje; El padre, a mejor actor (Anthony Hopkins) y mejor guion adaptado; Una joven prometedora, mejor película británica y mejor guion original, y La madre del blues, mejor maquillaje y mejor diseño de vestuario. Otra ronda se lleva el premio a mejor película de habla no inglesa; Lo que el pulpo me enseñó, mejor documental; y el Bafta a la mayor contribución al cine británico recae en Noel Clarke.