En 2009 la alta velocidad iba a unir Barcelona con Paris. Actualmente la línea no está terminada y la “conexión” se reduce al tramo Figueres-Perpiñán, que atraviesa la frontera entre Francia y España por el túnel del Pertús. Una historia sobre las distintas percepciones del tiempo, sobre la convivencia entre la alta y la baja velocidad en un punto fronterizo, entre el proceso de construcción de un viaducto y personas que conviven con la transformación de su paisaje en un entorno rural. La alta velocidad como una realidad a medias, como un futuro que está permanentemente por llegar, la baja velocidad como un presente a punto de desaparecer.