El actor Alec Baldwin, que mató accidentalmente a la directora de fotografía Halyna Hutchins durante el rodaje de una película en Estados Unidos, fue avisado de que la pistola de utilería que utilizó no tenía balas, según la declaración jurada en poder del tribunal del condado de Santa Fe, en el estado de Nuevo México. «Pistola fría«, gritó el director asistente de la producción, Dave Halls, cuando le pasó a Baldwin el arma, como se conoce en la jerga cinematográfica las pistolas que no cuentan con munición real, de acuerdo con los documentos conocidos hoy. Sin embargo, la pistola estaba cargada por lo que cuando el actor disparó murió accidentalmente la directora de fotografía Halyna Hutchins, mientras que el director de la cinta, Joel Souza, resultó herido. Por el momento, las autoridades descartan presentar cargos criminales y están entrevistando al equipo del filme con el fin de esclarecer los hechos. La compañía encargada del rodaje, en el que Baldwin ejerce como protagonista y productor, remite un escrito en el que asegura que el equipo completo se encuentra “devastado” por lo sucedido y se comprometía a ofrecer ayuda psicológica a todas las personas relacionadas con la filmación, que se suspenderá de manera indefinida. Este viernes, no obstante, se conoció que varios empleados del rodaje protestaron por supuestas malas condiciones laborales y falta de seguridad. Según fuentes citadas por el diario Los Ángeles Times, media docena de asistentes y operadores de cámara dimitieron en bloque el día del fatal accidente, ya que en las jornadas previas hubo problemas con ese mismo arma, que en su opinión no estaba correctamente supervisada.