Una exposición recorre en Viena desde hoy el trabajo de Stanley Kubrick como fotógrafo. La muestra, «Eyes Wide Open. Stanley Kubrick como fotógrafo«, se puede visitar en la galería Bank Austria Kunstforum hasta el próximo 13 de julio y expone ya en esas instantáneas la depuración estética que fue seña de identidad del cineasta. Su trabajo como fotógrafo fue redescubierto después de su muerte en 1999, y ese conjunto de imágenes muestran la historia de un niño prodigio que con 16 años vendió su primera foto al prestigioso semanario estadounidense Look. Esa primera fotografía, tomada en 1945 cuando iba camino de la escuela, muestra a un circunspecto quiosquero rodeado de diarios con la noticia en portada de la muerte del presidente Franklin Delano Roosevelt. Entre 1945 y 1951, el joven Kubrick hizo más de 27.000 fotografías para la revista Look, de las que se publicaron unas mil, con las que se ganó la admiración de la redacción por su afán de lograr siempre la perfección. Muchas de esas fotos estaban planificadas, ya que Kubrick solicitaba preparaba la escena, por eso que estas series se denominan «foto-ensayos» y no «foto-reportajes», según la comisaria de la muestra, Lisa Ortner-Kreil. «Para él, la diferencia entre cine y fotografía nunca existió. Hay una frase suya que dice que para hacer cine no hay que saber de cine, sino de composición fotográfica«, agrega Ortner-Kreil.