El director de cine Kiju Yoshida (antes Yoshida Yoshishige) fallece a los 89 años a causa de una neumonía. Junto con Nagisa Oshima y Masahiro Shinoda, Yoshida formó parte de la Nouvelle Vague de finales de los 50 y principios de los 60. Respaldada por los estudios Shochiku tuvo un gran impacto en el cine japonés tanto entonces como en las décadas posteriores. En 1960 debutó como director con el drama juvenil Good-for-Nothing. Ésta y sus siguientes películas, La sangre está seca (1960) y Amargo final de una dulce noche, con sus despiadadas descripciones de los males sociales contemporáneos, marcaron a Yoshida, junto con sus compañeros de Shochiku, Oshima y Shinoda, como rebeldes contra las convenciones del estudio. El trío llegó a agruparse bajo la etiqueta Shochiku Nouvelle Vague, un guiño a la Nueva Ola francesa que fue su influencia e inspiración.