La fiesta de los nominados a la 32 edición de los Premios Goya, que se entregarán el 3 de febrero, celebra la diversidad de las películas que compiten este año, con temas tan variados como idiomas en los que se han contado las historias, y todos se han felicitado de la aparición de caras nuevas. En la fiesta, que regresa a la Real Casa de Correos de la Puerta del Sol -sede del Gobierno regional madrileño- tras cinco años de ausencia, destaca la ausencia a la presidenta de la Academia, Yvonne Blake, que se recupera de un ictus, y a la que se desea una pronta recuperación con un gran aplauso. En su lugar, la vicepresidenta Nora Navas destacq la «excelente cosecha» de películas «marcadas por la pluralidad y la diversidad que demuestra que el cine promueve el diálogo entre lo distinto«. «Trabajos, todos ellos, de una calidad indiscutible -ha dicho Navas- para crear películas que nos permitan soñar«. La vicepresidenta también recuerda los 300 nuevos miembros que se han sumado este año a la Academia y agradece a los 159 nominados «las ganas, el esfuerzo y el respeto» con el que han llevado a cabo sus trabajos.