La Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) celebrará este 2015 sus sesenta años de vida con una edición especial, del 24 al 31 de octubre, donde, además de las diferentes secciones competitivas, articulará una programación paralela para proyectar su historia, patrimonio y orgullo. «Es una buena oportunidad para poner en valor, una vez más, la historia de nuestro festival: lo que fuimos, lo que hicimos, lo que programamos, los directores a los que promovimos, los caminos que abrimos«, explica el director del certamen, Javier Angulo, en una carta abierta. Según Angulo, esa trayectoria es su «principal patrimonio» y explica lo que son: «Un festival con personalidad propia reconocido en todo el mundo» que, casi desde sus comienzos, «apostó por un cine de autor y que hoy es su principal seña de identidad«. Desde su inauguración en 1956, de la mano de Antolín de Santiago, hasta 2015, habrán transcurrido sesenta entregas del segundo certamen cinematográfico más antiguo de España, detrás de San Sebastián, y el primero que abrió, con Fernando Lara en su dirección, una sección específica dedicada al género documental (Tiempo de Historia) que acaba de cumplir tres décadas.