Luis García Berlanga es condecorado este fin de semana con una «estrella póstuma» en el Paseo de la Fama de Hollywood para rememorar su aventura por la meca del cine cuando se cumplen 100 años del nacimiento del director. Una iniciativa no oficial y a título conmemorativo, bautizada como «Berlanga en Hollywood», y que ha sido impulsada por las entidades españolas Valencia Cultural Point y Laboratorio Cultural Ultramarino. Como parte de este reconocimiento, también se han promovido otras actividades para poner en valor la relevancia del paso del cineasta por Los Ángeles; como la entrega de una estatuilla onírica, que recibe el actor Manu Badenes interpretando al propio Berlanga desde la entrada del mítico Teatro Chino de Hollywood. El director valenciano viajó el 5 de abril de 1962 a Los Ángeles para asistir a la 34 edición de los Óscar postulándose con la cinta Plácido al premio en la categoría de Mejor Película de Habla no Inglesa. Un galardón que finalmente no consiguió. Ahora, en el marco del centenario de su nacimiento, se han celebrado estas dos jornadas gratuitas que sirven de cierre para un programa honorífico anual que también ha contado con la financiación del Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana.