El Festival de Cine de San Sebastián presenta hoy su diagnóstico ambiental y se ratifica en su compromiso de seguir adoptando medidas para reducir la huella de carbono derivada del evento de nueve días en septiembre y de la actividad de la entidad durante el resto del año. En los últimos meses, la empresa Naider ha realizado el diagnóstico ambiental del certamen que, como cualquier otra cita internacional, tiene un impacto económico y sociocultural positivo para la ciudad en la que se desarrolla, pero también genera un impacto ambiental notable como consecuencia, sobre todo, de la movilidad y presencia de una gran cantidad de asistentes: 178.000 espectadoras y espectadores, y 4.300 personas acreditadas. Para realizar el diagnóstico, se ha medido la huella de carbono a partir de información pormenorizada de todos los ámbitos. Además, se han realizado encuestas a todos los agentes vinculados con el Festival, así como una jornada de formación y capacitación con la plantilla y reuniones de seguimiento. Las categorías analizadas han sido la movilidad, los residuos, las contrataciones, la energía y el compromiso. El estudio ha determinado que durante su celebración, el Festival tiene un impacto ambiental elevado (568,3 toneladas CO2 por día), aunque en proporción es menor que el de otros eventos similares. Hace una década ya se efectuó un estudio para calcular la huella del certamen y, a pesar de que éste ha crecido de manera notable en número de películas, público y acreditados, el resultado no ha variado sustancialmente.