Un tribunal revolucionario iraní condena al cineasta iraní Mohammad Rasoulof a ocho años de prisión, latigazos y la confiscación de sus propiedades por el delito de “colusión con la intención de cometer crímenes contra la seguridad del país”. “El motivo principal para de la emisión de esta sentencia es la firma de comunicados y la realización de películas y documentales, que de acuerdo con el tribunal, son ejemplos de colusión y colusión con la intención de cometer crímenes contra la seguridad del país”, informa el abogado del cineasta, Babak Paknia. El abogado afirmó en la red social X que la sentencia fue emitida por la sala 29 del tribunal revolucionario, de la que no se había informado hasta ahora, y confirmada por la sala 36 del tribunal de apelación. “Ahora el caso ha sido remitido a la ejecución de las sentencias”, asegura Paknia. El último filme del director, Seed of the Sacred Fig Tree, se presentará en el Festival de Cine de Cannes, que comienza la próxima semana, y todo indica que él no podrá asistir. Paknia informó la semana pasada de que las autoridades iraníes estaban tratando de que Rasoulof retirase la película del certamen y que varios actores y miembros del equipo técnico habían sido citados e interrogados.