Tres nuevos filmes de importantes directores, previamente cosagrados por el Festival de Cine de Cannes, llegan a esta jornada con la que se inicia la semana. El cineasta surcoreano Hong Sangsoo aborda con meticulosidad un malentendido relacionado con un adulterio en Geu-Hu (Le Jour d’après) para tejer una comedia agridulce en blanco y negro, bañada en melancolía. La película narra la historia de Bongwan, un editor infiel y cobarde que no logra reponerse de la marcha de la empleada con la que ha engañado a su mujer. Por otro lado, cinco años después de Amor, Michael Haneke presenta la mordaz Happy End con dos de sus actores preferidos: Jean-Louis Trintignant e Isabelle Huppert. La crisis migratoria es el prisma que revela el cinismo que reina en nuestra época a través de la indiferencia inhumana de una familia burguesa del norte de Francia, desconectada de la realidad social que la rodea. Además, Yorgos Lanthimos regresa a Cannes con The Killing of a Sacred Deer, y se inspira en Eurípides para contar la historia de una pareja de médicos interpretados por Colin Farrell y Nicole Kidman. Finalmente, en su afán por innovar, Alejandro González Iñárritu presenta Carne y Arena (Virtually Present, Physically Invisible), que más que una película, se trata de una experiencia en realidad virtual que dura seis minutos y medio.