La capital de Arabia Saudí, Riad, acoge la inauguración de la primera proyección de una película en una sala de cine después de más de tres décadas de suspensión por la imposición de severas restricciones en el reino. El centro del Rey Abdalá al Mali, en Riad, ha sido el elegido para la ceremonia de apertura del primer cine con la proyección de la película Black Panther, de Ryan Coogler. El precio de las entradas es de unos 50 riales (10,7 euros). La proveedora AMC firmó el pasado 12 de diciembre un memorando de entendimiento con el Fondo de Inversiones Públicas en Arabia Saudí para explorar formas de proyectar y distribuir el contenido cinematográfico. Las salas de cine fueron cerradas en Arabia Saudí en los años ochenta tras el endurecimiento de las normas y la imposición de severas restricciones a las libertades individuales, la cultura, el ocio y todas las manifestaciones artísticas. La decisión de las autoridades saudíes de dar licencias para abrir salas de cine se produce en el marco de la política de «apertura» adoptada por el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, desde que accedió al cargo, en junio de 2017.