El alcalde de Cádiz, José María González, varios de sus concejales y un representante de la Asociación Proderechos Humanos de Andalucía declaran en el juzgado después de haber sido denunciados por delito de odio por haber cancelado un ciclo de cine israelí en septiembre del año pasado. Según un comunicado de la APDHA, las declaraciones llegan después de que el juzgado de Cádiz atendiera la querella de la organización Acción para la comunicación de Oriente (ACOM). La ACOM denunció a la APDHA y al Ayuntamiento de Cádiz por haberse sumado a la «estrategia de boicot, desinversiones y sanción (BDS) promovida por diversas entidades internacionales, inspirada en la campaña de bloqueo al régimen del apartheid de Sudáfrica«. La campaña pretendía presionar a Israel «visibilizando su responsabilidad en las grandes vulneraciones de derechos humanos del pueblo palestino«, según explica la APDHA, lo que llevó al Ayuntamiento gaditano hace un año a no permitir la organización en Cádiz de un ciclo de cine que había patrocinado la embajada de Israel.