Un jurado de Los Angeles absuelve por plagio de forma unánime a los productores de la película El último samurái. En el año 2005, los hermanos Aaron y Matthew Benay demandaron a los productores del largometraje en el que Tom Cruise encarnaba al capitán Nathan Algren por supuesto robo del guión. Los hermanos y guionistas, alegaban que ellos habían escrito la misma historia, que también llevaba por título El último samurái, en el año 2000.
Según los hermanos Benay, su guión fue a parar a manos de los productores Marshall Herskovitz y Ed Zwick; y éstos, sin su consentimiento, se apoderaron de él y rodaron la película. «Ed y yo estamos extremadamente aliviados. Es duro estar bajo una nube de acusaciones falsas durante tantos años. El hecho de que el jurado haya dicho que nunca vimos ese guión ha hecho justicia«, señala el productor Marshall Herskovitz.
El último samurái se estrenó en 2003, obtuvo cuatro nominaciones a los Oscar y recaudó más de 267 millones de euros en todo el mundo.